Todos en algún momento de nuestra vida hemos tenido una
mascota en nuestra casa o alguien cercano a nosotros la tuvo. Pero, ¿sabemos
los beneficios que nos aporta el tener una mascota a nuestro cuidado?
Probablemente no, o quizás nos hagamos una idea pero no
somos completamente conscientes de ello.
Si sigues este blog, podrás descubrir cosas interesantes y que quizás
conozcas acerca de los animales y su influencia en tu salud y bienestar.
En esta primera entrada sobre animales, vamos a hablar del
beneficio que supone en el desarrollo y educación de nuestros hijos.
Ya desde pequeños, los niños muestran gran interés y
curiosidad por los animales. Son un gran estímulo para ellos, pues desarrollan
sus sentidos de muchas maneras. Lo primero que hace un niño al ver un perro o
un gatito es ir a acariciarlo, cogerlo y jugar con él. Su primer instinto es el
de acercarse, verlo, tocarlo y sentirlo.
Los animales refuerzan la capacidad de interrelación con
otros niños y adultos, desarrolla su curiosidad, su imaginación, la
comunicación, su afecto y algo muy importante que no es fácil de enseñar a
nuestros hijos, el deber y la responsabilidad.
Todos sabemos que tener una mascota implica una serie de
responsabilidades diarias que no podemos pasar por alto, como son alimentarlos,
sacarlos a pasear o bañarlos.
Si acostumbramos desde pequeñitos a nuestros hijos a
participar en estas tareas, estaremos logrando que adquieran una serie de
habilidades y un mejor desarrollo.
Por lo general, los niños que crecen con animales y son
agentes activos de su cuidado tienden a ser más tranquilos, su percepción de la
responsabilidad se acentúa y al mismo tiempo se vuelven más afectivos y
cariñosos.
Por lo tanto, si tienes la posibilidad de que tus hijos
crezcan en presencia de una mascota, ya sea un perro, un gato, un hámster u
otro animal, no lo dudes, estarás ayudando a su desarrollo, a su crecimiento, y
habrás dado un paso muy importante en su educación.
Pero ten cuidado, puesto que los animales no son personas,
obvio. Y debido a esto, sus reacciones a determinados comportamientos del niño
o juegos pueden ser imprevisibles, así que explícale a tu hijo que un animal es
un ser vivo, con sentimientos, y que aunque no podamos comunicarnos
directamente con ellos, tienen sentimientos y debemos cuidarlos y darles
cariño,
La famosa frase “no hagas a los demás lo que no quieres que
te hagan a ti” se puede aplicar perfectamente a los animales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario