¿Sabíais que existe un nuevo tratamiento de moda entre los
deportistas? Se utiliza en la medicina deportiva y también en el mundo de la
estética. Es la crioterapia, también se conoce con el nombre de criosauna o
aerocrioterapia. Os gustaría saber por qué es tan beneficioso y en que consiste? Pues seguid leyendo.
La crioterapia es la aplicación de frío con fines
terapéuticos, debe ser aplicado por profesionales que controlen la temperatura
corporal y la aplicación de frío a través de vapor de nitrógeno para no
perjudicar al organismo.
Es ideal para tratar lesiones, mejorar la recuperación tras
una dura sesión de ejercicio o adecuar mejor el cuerpo para aprovechar mejor el
esfuerzo. Además, mejora el estado de la piel, ayuda a quemar grasas y a
eliminar toxinas.
La crioterapia lo que hace es alterar los mecanismos termorreguladores
del organismo, ya que produce pilo-erección. Consigue cerrar el sistema
vascular periférico, mientras que el central sufre una apertura sub-máxima que
genera una enorme circulación sanguínea que alcanza todos los niveles celulares
y mecanismos de nutrición metabólica.
Alguno de los beneficiosos que nos aporta la crioterapia son
los siguientes:
- Hace trabajar el músculo cardíaco aumentando su volumen, pero no su frecuencia cardíaca.
- Favorece la acción de la insulina.
- Mejora la digestión estomacal y su musculatura.
- Mejora la absorción de vitaminas.
- El organismo elimina mejora sustancias tóxicas acumuladas en los tejidos blandos.
- A los deportistas ayuda a tratar lesiones.Indicado para tratar alteraciones dérmicas.
Pero también tiene sus contraindicaciones, y es que, todas
aquellas personas que sufran patologías en las que el organismo no sea capaz de
mantener los mecanismos de compensación vascular no deberá realizar esta
técnica. Por ejemplo, infartos de miocardio, patologías vasculares, personas
con antecedentes de tromboembolismo, personas que sufran el síndrome de Raynaud o
mujeres embarazadas.
Para iniciar una sesión tienes que ir en ayunas y te
introducirán en una cabina en donde estarás solo con unos calcetines
especiales. La sesión dura 3 – 4 minutos y estás sometido a unos chorros de
vapor de nitrógeno que puede llegar a 200 grados bajo cero. Cuando se termina la sesión te pones un
albornoz y tomas una infusión para favorecer la diuresis de la gran cantidad de
toxinas que has generado tras este tratamiento. El precio de la sesión ronda
los 80 euros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario