sábado, 14 de noviembre de 2015

STEVIA, ¿QUÉ ES ESO?

La stevia es un arbusto de unos 80 centímetros de alto y hoja perenne que crece en Sudamérica, concretamente entre Paraguay y Brasil. Lo curioso de él, es que es cien veces más dulce que el propio azúcar, pero más sorprendente todavía es que no provoca el aumento de los niveles sanguíneos de insulina.

Las hojas son las zonas más dulces de la planta, por tanto, es ahí donde residen las propiedades terapéuticas de la misma. Sus semillas son muy ligeras, por tanto, suelen ser diseminadas por el viento, lo que hace que su capacidad de germinación sea escasa. En concreto en España, suelen darse en el mes de octubre.



Lo importante es que la hoja de la stevia puede consumirse con muchos menos riesgos que otros edulcorantes artificiales. Una opción para obtenerla sería plantarla en casa; sino, comprar las hojas disecadas sería el camino que quedaría. El siguiente paso es triturar dichas hojas hasta obtener un polvo dulce y finalmente, utilizarlo en el café, el té, repostería, o todo lo que se nos ocurra.

Buscando, hemos encontrado que son muchos los beneficios que esta aporta. Empezaremos por lo relacionado con la caspa y la salud del cabello, pues se cree que un concentrado de esta planta hace al pelo más fuerte, lo libera de la caspa y lo rejuvenece. Es tan simple como echar unas tres gotas de stevia en tu champú habitual. Otra opción es utilizarla después del champú, como si fuese un acondicionador.


Por otra parte, puede estabilizar los niveles de azúcar, aumentar la resistencia a la insulina, promover la producción de insulina si se necesita, disminuir la absorción de glucosa en sangre o eliminar la candidiasis. Al regular todo lo relacionado con el metabolismo del azúcar, puede también inhibir el deseo de tomar alimentos dulces y aceitosos.

Todo esto se debe a que es baja en carbohidratos, calorías y azúcar. Entonces, poco a poco va siendo capaz de interferir en las funciones del hipotálamo y contribuir en la pérdida de peso. En el caso de que busquemos eso, se recomienda beber una taza de té de stevia o mezclar unas quince gotas de la misma en un vaso de agua antes de cada comida.

En lo que a la gingivitis o inflamación de las encías se refiere, la stevia tiene unas propiedades antibarcterianas que suprimen el desarrollo de organismos infecciosos en encías y dientes mejorando la salud oral. Por tanto, lo ideal sería hacer enjuagues bucales con ella o sino añadir unas gotas de la misma a nuestra pasta dental.

Además es una buena ayuda digestiva, pues tomar stevia después de cada comida puede aliviar el ardor de estómago y favorecer la digestión. Otro dato curioso es que beberla una dos veces al día puede combatir nuestros problemas de hipertensión aliviando los niveles de presión arterial.

Un estudio hecho con pollos demostró que promueve la absorción de calcio, y que por lo tanto, es un factor importante a la hora de aumentar la densidad ósea. Esto solucionaría muchos problemas de osteoporisis. Lo correcto en este paco sería hacer té de alfalfa y stevia de dos a tres veces al día.

Por último, se demostró que es ideal para curar los distintos trastornos de la piel, todo por su propiedad antioxidante, antibacteriana y antiséptica. Basta con aplicar directamente sobre la piel afectada una pequeña cantidad de stevia.  En cambo si lo que queremos eliminar son las arrugas, tenemos que decir que también es útil: es capaz de suavizarlas si aplicamos una pasta hecha de sus hojas trituradas durante veinte minutos. A continuación, su efecto seria óptimo si secamos y aplicamos aceite de coco virgen extra y dejamos actuar durante la noche.

No hay comentarios:

Publicar un comentario